![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgHT_ZK03m-wGFfKhAr5ss2fNUszw9OVyaTbhNq68azG8THOsqurNhzfUs6DwL_1VmQfeKH_193NwbNWdss4gzaNVN7L4eGFaENy3MhGm2aNzxSM8gG6jXkjjd1vs4NP4kock6-rbA6wPjN/s400/hippies1.jpg)
Luego de la Segunda Guerra Mundial (1945), se habían generalizado las políticas económicas de orientación “keynesianas”, que se basaban en el impulso que el Estado le daba a la demanda y a la organización del proceso productivo a través del “taylorismo” (organización racional y científica del trabajo) y del “fordismo” (organización del trabajo en cadena). Estas circunstancias hicieron aumentar la productividad y a su vez abaratar costos, lo que permitió a las clases medias y trabajadoras acceder al mercado de bienes de consumo durables, como nunca antes en la historia.
Estas mejoras económicas provocaron en la sociedad en general un adormecimiento en cuanto a los reclamos y las luchas obreras. La producción industrial se incrementó, y con ello, comenzó una etapa de consumo de masas. Los electrodomésticos, el auto y el teléfono pasaron a ser símbolos de status personal. Artículos que eran privativos de minorías, pasaron a ser consumidos por una gran cantidad de personas.
La guerra de Vietnam fue también un hecho clave que mostró al movimiento en total oposición al conflicto bélico. Su gran inconformismo se manifestó en diversas movilizaciones en contra de la guerra y de todo tipo de violencia.
Durante la década del ´60, dos grandes movimientos también cobraron fuerte impulso: uno era la “liberación femenina” y el otro la lucha contra la discriminación étnica. Además de los cambios en la familia y la rebelión juvenil, se sumaba la denominada “revolución sexual”. La aparición de las píldoras anticonceptivas y su difusión masiva también influyeron en los cambios producidos en el nivel social.
En todo ese marco, muchos jóvenes comenzaron a ensayar experiencias no convencionales. Consideraban mediocre y aburrido el mundo “burgués” e iniciaron una búsqueda hacia una vida espiritual y en contacto con la naturaleza.
Los “hippies” tomaron como actitud contestataria retirarse de la sociedad a la que condenaban por actitud cómoda y conservadora y comenzaron entonces a reunirse en comunas, constituidas como organizaciones libres y sin jerarquías, en total contraposición con lo que pasaba en la sociedad burguesa.
Las reuniones de los hippies se volvieron cada vez más conocidas, pero la que quedó instalada en la memoria fue el festival de “Woodstock” en 1969, en el cual se reunieron medio millón de jóvenes durante “tres días de paz y amor”.
El movimiento hippie encontró en el rock un modo de expresión inigualable, a través de la música de cantantes como Janis Joplin o de bandas como Love, Grateful Dead, Jefferson Airplane y Pink Floyd.
Otras características asociadas a ellos fueron:
- La tolerancia y el amor como valores básicos.
- Su estilo psicodélico y lleno de colorido, inspirado por drogas alucinógenas como el ácido lisérgico, lo cual se plasmaba en la moda y en las artes gráficas.
- Uso de drogas: marihuana, hachís y alucinógenos.
- El cabello largo en hombres y mujeres y su forma particular de vestir, como señal de pertenencia y como muestra de su actitud contestataria y contracultural.
- Ropas de colores brillantes.
- Ropas desteñidas.
- Camisas largas, polleras largas, pantalones con botamanga tipo “pata de elefante”.
- Ropas indias o africanas.
- Muchos se confeccionaban su propia ropa como protesta ante la cultura consumista.
- Símbolos como la flor o dibujos de los aborígenes americanos..
- Uso de incienso y recuperación de los valores naturales de las plantas.
- Reuniones en fiestas al aire libre o en casas de amigos para tocar música o componer.
- Tolerancia hacia la homosexualidad y la bisexualidad.
- Amor libre: traducido en un rechazo a la institución del matrimonio y en una conducta sexual contraria a las imposiciones de la Iglesia o del Estado, vistas como intromisiones a la vida personal.
El entonces presidente Ronald Reagan definió al hippie como “un tío con el pelo como Tarzán, que camina como Jane y huele como Chita”.
Hoy en día, los símbolos y valores del movimiento hippie, paradójicamente terminaron siendo absorbidos por la sociedad de consumo y entraron a formar parte de los círculos comerciales del sistema.
por Mariana Correa
No hay comentarios:
Publicar un comentario